Complicidad.

Complicidad con sólo mirarte, y... eso es magia. Es mágico todo lo que me puedes llegar a transmitir con una simple mirada, tan inocente y tan tierna. 
Complicidad cuando te vi por primera vez, siendo yo tan pequeña, entendiendo tan poco de cualquier cosa. Pero no me hizo falta saber mucho para darme cuenta de que ibas a ser lo mejor que me podría dar la vida. 
Complicidad incluso cuando discutimos, ¿y esto por qué? Bueno, porque siendo tan diferentes nos complementamos de la mejor manera y eso no tiene precio. 
Complicidad en todo. Porque no he encontrado a otra persona que me llene tanto como tú, que me alegre los días como tú y que me quiera de la forma en la que tú sólo lo sabes hacer.
No sé a quién agradecerle todo esto, que estés en mi vida, en mi día a día aunque parezca mentira, haberte tenido estos años y tenerte en los próximos que nos vienen. Pero te agradezco a ti todo lo que haces por mí y todo lo que seguirás haciendo. Y también le agradezco a tus padres haberme dado a la gran hermana que tengo.

Suena un poco raro que todas estas palabras salgan de mí, ¿verdad? Pero bueno, nunca es mal momento para demostrar cuánto quieres a alguien, y teniendo en cuenta que yo no lo suelo hacer mucho... vale el doble.
A mí también me parece raro verme diciendo estas cosas. Todos los que me conocéis sabéis que soy fría, reservada... pero he de decir que con ella no. Ella es de las pocas personas que sabe sacar mi otro lado. Es capaz de hacerme ver lo bonito de las cosas, e incluso de los problemas. Tiene una forma tan bonita de ser ella... que no sabría qué hacer si algún día me faltara. Porque sí, puede sonar muy dramático o de película, pero no sabría qué sería de mí sin mi hermana. 

Y me vuelvo a dirigir a ti, a la pequeña de la casa, a la alegría de la familia y a la persona más tierna del mundo. No cambies nunca, quiero verte crecer toda mi vida. Quiero que aprendas a mi lado, ayudarte en todo, apoyarte siempre y nunca dejarte sola. Porque no he visto a nadie tan valiente y fuerte como tú (después de tu madre), tan optimista y tan sincera. Y no quiero que por nada del mundo desaparezcan estos valores que tienes y has tenido desde el primer día. Porque aunque todavía eres pequeña y te quedan muchas cosas por vivir, sé que me vas a enseñar más cosas de las que me imagino, y no te puedes hacer a la idea de cuánto me gusta esto. Porque es cierto que la familia no se elige, pero estoy segura de que si tuviera que elegir, sería a ti. Nada se puede comparar al amor de una madre, pero tampoco al amor de una hermana. 

Muy pronto te veo, reina. Te adoro. ♥

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"Si juzgas a un pez por su habilidad para trepar un árbol vivirá toda la vida creyendo que es estúpido."